Los  Comités Consultivos Nacional de Normalización de la Secretaría de Economía y el  de Regulación y Fomento Sanitario de la Comisión Federal para la Protección  contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) anunciaron la aprobación el pasado viernes  24 de enero de la modificación a la Norma Oficial Mexicana  NOM-051-SCFI/SSA1-2010  sobre el  etiquetado de alimentos y bebidas no alcohólicas preenvasados.
De  acuerdo con comunicado de esta Secretaría, entre los principales cambios que se  aprobaron figura el etiquetado frontal de advertencia que les permitirá a los consumidores  identificar de una “forma rápida, clara y veraz aquellos productos con exceso  de nutrientes críticos, como azúcares, grasas trans, grasas saturadas, sodio y  contenido energético. Con ello se da cumplimiento a la reciente modificación de  la Ley General de Salud por parte del Honorable Congreso de la Unión”, afirma  el comunicado.
A partir del 14 de agosto  de 2019 los integrantes de los comités mencionados y sus grupos de trabajo  empezaron a colaborar de manera estrecha sosteniendo más de 20 reuniones con  técnicos y expertos para otorgarle el soporte científico a la norma.
Posteriormente,  el 11 de octubre de 2019, el proyecto de NOM se publicó en el Diario Oficial de  la Federación para consulta pública, finalizando el 10 de diciembre, lo que  generó más de 5.200 comentarios que convirtieron la labor de normalización en “la  de mayor interés y participación de la sociedad mexicana”, reza el comunicado.
La Secretaría de Economía y  la COFEPRIS convocaron a todos los sectores interesados a llevar a cabo  reuniones para estudiar y atender los comentarios recibidos y hacer las  modificaciones necesarias al proyecto.
 
Estos comentarios se clasificaron  en 178 numerales que fueron sometidos a revisión, análisis, discusión y  resolución. De ellos, 177 (98%) fueron aprobados por consenso; los restantes fueron  aprobados por mayoría de votos, dice el comunicado de esta entidad mexicana.
                                Entre los comités y grupos de trabajo que  participaron en las reuniones figuraban el sector industrial, organismos  internacionales, centros de enseñanza superior, colegios de profesionales, la sociedad  civil y centros de investigación, así como diversas dependencias del Gobierno  de México.