Luego de casi 18 meses de asumir la presidencia de México, el presidente Andrés Manuel López Obrador salió por primera vez del país para una visita a Estados Unidos, donde se reunió con Donald Trump para firmar el tratado de libre comercio entre México, Estados Unidos y Canadá, que entró en vigor el pasado 1 de julio.
El encuentro tuvo lugar en Washington, e incluyó una cena con un grupo de destacados empresarios de los dos países, que aprovecharon la oportunidad para anunciar importantes inversiones en sectores de empaques, energía, aeronáutica, alimentos, acero y telecomunicaciones, entre varios más.
A pesar de que el encuentro se realizó a puerta cerrada, se conocieron informaciones de parte de algunos de los invitados que reflejan el buen clima de negocios que se desprendió del encuentro y de la firma del T-MEC. “Estamos en la mejor disposición de favorecer sus inversiones en México”, fue la declaración AMLO comunicada por Patricia Armendáriz, directora general de Financiera Sustentable y consejera de Banorte a través de su cuenta de Tweeter.
Entre los anuncios expresados en la reunión, se destacan el que hizo Miguel Rincón, directivo de la empresa Biopappel, quien se refirió a la puesta en marcha de una planta de empaques en Indiana y de la próxima apertura de dos fábricas de papel sostenible, una en Washington y otra en Texas. Por parte de Estados Unidos, además de inversiones anunciadas en infraestructura energética, manufacturas y producción de acero, se contó con la presencia de representantes del sector de alimentos, en cabeza de Michael Dykes, presidente de International Dairy Food Association.
La visita de AMLO a Estados Unidos no estuvo exenta de críticas en México. Medios digitales e impresos mexicanos sugirieron el posible uso que el presidente Trump haga del encuentro para mejorar su popularidad con la comunidad latina antes de las elecciones de noviembre, e incluso representantes del Partido Demócrata estadounidense habían pedido la cancelación de la visita. No obstante, los beneficios de la reunión fueron destacados por muchos de los medios de comunicación, que citaron una encuesta realizada por la firma consultora Vestiga antes del viaje del presidente López Obrador. En ella se señala que 79% de los empresarios mexicanos consultados aprobaban el viaje de AMLO a Washington y señalaban la conveniencia de que exista una buena relación política y personal entre los dos mandatarios.
En 2019, México se convirtió en el mayor socio comercial de Estados Unidos, con un intercambio diario estimado de 1.600 millones de dólares entre los dos países, un hecho que se resaltó en la comunicación oficial conjunta expedida después del encuentro. Allí se destacó, además, la importancia del acuerdo firmado, declarándolo como “el instrumento idóneo para proporcionar certeza económica y mayor confianza a nuestros países, lo que será fundamental para la recuperación que ya ha comenzado en nuestras dos naciones… El T-MEC permitirá que nuestra exitosa relación económica --una de las más fuertes del mundo-- se expanda aún más en los años venideros, continuando así nuestra gran historia de cooperación compartida”, concluye la comunicación firmada el pasado 8 de julio por los dos mandatarios.