5 grandes desafíos que impone el COVID-19 a empresas de bienes de consumo empacados en América Latina
Un reto inmediato de la crisis por el coronavirus ha sido la devaluación de muchas monedas en América Latina, que encarece la compra de materias primas e insumos importados por parte de las empresas fabricantes de productos de consumo empacados.
Para un número importante de empresarios (14,2%) el escenario económico y financiero es de gran incertidumbre ante la indecisión de algunos gobiernos de América Latina frente a las medidas que deberán aplicarse para respaldar el funcionamiento de las empresas.
Este segundo post preparado con base en las respuestas a la encuesta de Mundo PMMI acerca del impacto del coronavirus en nuestra industria ofrece una mirada a los principales retos que las CPG enfrentan en el incierto escenario de hoy.
En medio de condiciones adversas y sin importar algunas disrupciones en las cadenas de suministro como las que señalamos en el post anterior, las empresas productoras de bienes de consumo masivo (CPG) siguen adelantando sus operaciones y atendiendo los mercados con productos esenciales para el bienestar y la supervivencia de la población.
Adecuando sus rutinas a las condiciones imperantes, los empresarios y muchos de sus empleados en cargos directivos orientan el funcionamiento de sus fábricas haciendo uso del internet y de las posibilidades que ofrecen hoy las plataformas digitales. Esta modalidad ha venido creciendo cada día y ha sido acogida por un 55% de participantes en la encuesta, que se encuentran trabajando hoy desde sus casas. (Gráfica 1).
Es también significativo el número de empresas que ha comenzado a hacer adecuaciones en sus líneas de producción, y otras que se encuentran considerando hacerlas, para atender los requerimientos de los gobiernos y las autoridades de salud de contar con dispositivos médicos para enfrentar el coronavirus, tales como respiradores, máscaras y otros suministros especializados. (Gráfica 2)
Cinco desafíos / campos de acción
Preguntar a los empresarios por las dificultades que enfrentan en estos momentos en sus distintas actividades fue uno de los propósitos principales de la encuesta en línea de Mundo PMMI, y sus respuestas pueden enmarcarse en los retos que están asumiendo en cinco áreas principales (Ver Gráfica 3).
Económico y financiero: Un efecto inmediato de la crisis del coronavirus ha sido la devaluación de muchas monedas en América Latina, que encarece la compra de materias primas e insumos importados. Para un número importante de empresarios (14,2%) el escenario económico y financiero es de gran incertidumbre ante la indecisión de algunos gobiernos frente a las medidas que deberán aplicarse para respaldar el funcionamiento de las empresas. A lo anterior se suman la falta de liquidez por retrasos en los pagos de sus clientes, el cubrimiento de gastos fijos cuando no se cuenta con ingresos, las altas tasas de interés de los créditos, y la continuidad en el pago de los impuestos.
“En esencia, se trata de sobrevivir económicamente durante y después de la pandemia”.
Producción: Las dificultades en la producción que algunas empresas están sintiendo representan un desafío para 31% de los empresarios consultados, a las que se suman descensos en las ventas que resultan de la inactividad de algunos de sus clientes o a su presencia en otros países. El uso de canales virtuales no tiene para algunas empresas la misma eficiencia de los mecanismos tradicionales de ventas; para otras, sin embargo, con clientes tradicionales y una posición consolidada en los mercados, los aumentos en las ventas han sido significativos.
“Espero que mis clientes no cierren sus negocios, para seguir vendiéndoles y poder subsistir como empresa”.
Salud y seguridad: La preocupación por la salud y seguridad de los empleados y trabajadores es de una alta prioridad para 23,0% de las empresas consultadas, que han tomado medidas efectivas para la prevención de la propagación del coronavirus. Los participantes en la encuesta señalan sin embargo la necesidad de hacer énfasis en la cultura de higiene y la aplicación rigurosa de prácticas de desinfección que ayuden a evitar la extensión de la amenaza de contagio. Estas medidas deben acentuarse con los trabajadores que se desplazan a las instalaciones en transporte público y hacerse extensivas al conjunto de sus familias.
“Necesitamos poner en práctica los más altos protocolos de prevención, concientizar al personal, y aplicar normas de control de saneamiento muy intensos, respaldadas por ayudas físicas, para lograr que el contagio sea CERO”.
Abastecimiento: Algunas distorsiones en la cadena de suministro, como las señaladas en el artículo anterior son para un 20,0%de los participantes en la encuesta un desafío importante que deben afrontar en las actuales circunstancias. Además del desabastecimiento que están resintiendo algunas empresas, se resaltan en las respuestas el encarecimiento que se observa en las materias primas e insumos, la dificultad para garantizar el empaque de los productos, y la ralentización de los procesos de entrega de suministros.
“El gran reto está en poder continuar con el proceso de producción, para abastecer los canales de distribución y asegurar que el consumidor tenga los productos que necesita”.
Laboral: La preservación de los empleos es otra prioridad para los empresarios que participaron en nuestra encuesta (11,5%). A pesar de los rigores económicos que supone el pago de nóminas con niveles distorsionados de producción y ventas, las empresas no han acudido al despido masivo, una decisión para la cual esperan contar el respaldo de los gobiernos de los distintos países en América Latina.
“Buscamos mantener la operación de la empresa al máximo posible, pero sin afectar la plantilla laboral. Es muy complicado operar con tan poco apoyo, considerando que el gobierno nacional no está haciendo hasta el momento ninguna concesión fiscal o laboral”.
En el próximo Post preparado con la información reunida de la encuesta sobre la Industria ante el Covid-19, analizaremos los efectos de la pandemia sobre los planes de inversión y modernización tecnológica de las empresas en América Latina.
