En un movimiento audaz hacia la sostenibilidad, Diageo, el renombrado fabricante de marcas icónicas como Guinness, Smirnoff y Don Julio ha lanzado su primera prueba de una botella de 70cl hecha de papel para Johnnie Walker Black Label. Este concepto revolucionario de empaque es parte del compromiso de la compañía para reducir su huella de carbono y mejorar las prácticas ecológicas en su portafolio global.
A partir del 24 de septiembre, esta botella, compuesta en un 90% por papel, se está probando en el bar 1820 de Johnnie Walker Princess Street en Edimburgo, Escocia. La tirada limitada de 250 botellas ofrecerá a los bartenders y clientes una experiencia de primera mano con esta nueva solución de envasado que marca un avance importante en la industria de las bebidas.
El diseño de la botella conserva la clásica forma cuadrada por la que es conocida Johnnie Walker, pero incorpora detalles únicos y de alta calidad. Los lados de la botella presentan facetas cuidadosamente talladas, y el icónico logotipo del caballero que camina a grandes zancadas está grabado tanto en la botella como en el cierre, manteniendo la sensación de lujo que los consumidores esperan de la marca.
La tecnología del papel detrás de la innovación de Johnnie Walker
La botella de papel de Diageo es el resultado de un esfuerzo colaborativo entre la compañía, PA Consulting y PulPac, como parte del colectivo Bottle Collective. Esta asociación ha elevado a un alto nivel los límites de la tecnología de envase al aprovechar la innovación de Fibra Moldeada en Seco (DMF, por sus siglas en inglés). La botella está compuesta en 90% de papel, con un fino revestimiento de plástico para asegurar que el whisky se mantenga fresco, sin afectar su sabor o calidad.
Los prototipos de la botella de fibra moldeada en seco han demostrado ser aptos para el reciclaje en molinos de papel estándar, según el método de prueba de la Confederación de Industrias Papeleras Europeas (CEPI, por sus siglas en inglés). Diageo informó que los resultados iniciales de pruebas realizadas por un importante reciclador en el Reino Unido han sido positivos, y las pruebas continúan con empresas de gestión de residuos líderes tanto en el Reino Unido como en otros mercados europeos. La capacidad de reciclaje será un factor clave a confirmar en futuros ensayos y lanzamientos a gran escala, mientras se sigue evaluando, aprendiendo y ajustando, si es necesario.
Una de las principales ventajas de esta botella hecha de papel es su peso. Con aproximadamente 60% más liviana que una botella de vidrio tradicional, esta innovación de envase no solo reduce los costos de transporte, también disminuye las emisiones de carbono asociadas con la distribución. Según un análisis externo del ciclo de vida, la botella de papel podría llevar a una reducción de hasta 47% en las emisiones de carbono, en comparación con la botella de vidrio estándar de la referencia Johnnie Walker Black Label.
Además, la botella ha sido diseñada teniendo en cuenta la reciclabilidad, pues el revestimiento plástico interior no está unido al exterior de papel, lo que simplifica el proceso de separación en las instalaciones de gestión de residuos. La botella de prueba marca el comienzo de este tipo de innovaciones, ya que Diageo señala que continúa explorando mejoras en la reciclabilidad y refinando el diseño general.
Prueba en el mundo real de la botella de papel para Johnnie Walker
La prueba que adelanta Diageo en el bar 1820 en Edimburgo no se limita a la validación de los aspectos tecnológicos del nuevo envase, también de su funcionamiento en el mundo real. Aunque el público en general no podrá comprar la botella directamente, podrá observar su uso detrás de la barra, ofreciendo una vista al futuro del empaque de whisky. Al introducir la botella de papel en el entorno de un bar, Diageo pretende recopilar valiosa información de los bartenders. ¿Cómo sirven desde ella? ¿Cómo se comporta la botella durante turnos agitados? ¿Afecta su diseño más liviano la usabilidad? son algunas de las preguntas que se busca responder con la prueba.
Esta no es la primera incursión de Diageo en el empaque de papel. A principios de 2024, la compañía realizó con éxito una prueba de una botella de Baileys hecha de papel en el Festival Time Out de Barcelona. La botella miniatura de 80 ml de Baileys utilizaba una tecnología similar de Fibra Moldeada en Seco, y las lecciones aprendidas de ese experimento a menor escala han sido fundamentales en el desarrollo del diseño más grande y complejo de la botella de Johnnie Walker Black Label.
Jennifer English, directora global de la marca Johnnie Walker, destacó en la comunicación sobre el lanzamiento la importancia de esta nueva prueba: “Estamos constantemente moviendo los límites de la innovación no solo para ofrecer la calidad premium y el diseño icónico que nuestros clientes esperan, sino para hacerlo de una manera que refleje nuestras ambiciones de sostenibilidad”.
La prioridad de reducir la huella de carbono con botella de papel
Un informe de Análisis de Ciclo de Vida realizado por un especialista externo independiente contratado por Diageo ha indicado que la nueva botella de papel de Johnnie Walker Black Label tiene el potencial de reducir las emisiones de carbono hasta en 47% en comparación con la botella de vidrio de 70cl del mismo producto. Sin embargo, estos ahorros deberán ser confirmados conforme avance la fase de pruebas, se recopilen aprendizajes y se perfeccione la tecnología antes de su implementación a mayor escala.
La compañía ha estado explorando una amplia gama de soluciones de envasado con el objetivo de reducir las emisiones de carbono. Por ejemplo, Johnnie Walker recientemente introdujo la Blue Label Ultra, la botella de whisky de vidrio más ligera del mundo, que pesa solo 180 gramos. Este experimento de diseño demuestra cómo la reducción del peso del vidrio puede disminuir el impacto ambiental, y las lecciones aprendidas guiarán futuras innovaciones en empaque.
Diageo está explorando igualmente soluciones de empaque de aluminio, y presentó una botella de 70cl de aluminio para Baileys. La compañía también trabaja en conjunto con ecoSPIRITS, una empresa de tecnología de economía circular, como parte de un acuerdo de licencia global para reducir los residuos de empaque en el mercado de bebidas premium.
Nuevas metas en el futuro del envasado en papel para bebidas espirituosas
A medida que Diageo continúa desarrollando y probando sus botellas hechas de papel, todavía hay algunos desafíos por superar. Un aspecto clave que se está examinando es el tapón de la botella. Si bien el cierre de la botella de prueba, hecho de una combinación de corcho y tecnología de papel, no es actualmente reciclable, Diageo está trabajando activamente en soluciones alternativas para futuras versiones.
Jamie Stone, experto en diseño e innovación en PA Consulting, destacó el potencial de esta tecnología innovadora: “Estas botellas abren nuevos caminos en el diseño de envases y muestran el potencial para reducir significativamente las emisiones de carbono, mientras conservan la elegancia y el lujo esperados en el mercado de bebidas premium.”
La retroalimentación recibida de los bartenders y los clientes durante esta prueba desempeñará un papel crucial en la refinación del diseño y la funcionalidad de la botella, para asegurar que cumpla con los altos estándares esperados para el whisky Johnnie Walker Black Label, de alto reconocimiento en todo el mundo.
Aunque la icónica botella de vidrio probablemente seguirá siendo un elemento básico del mundo del whisky, innovaciones como la botella de papel de la marca Johnnie Walker demuestran el interés de la industria por enfrentar los desafíos ambientales de hoy, sin sacrificar la calidad o el lujo que los clientes esperan.