Tras una serie de evaluaciones de las regulaciones que prohibían el uso recreativo de marihuana en el país, la Corte Suprema mexicana declaró esta semana su inconstitucionalidad y ordenó al Congreso sancionar las leyes que lo legalizarán. Bajo la nueva medida, el Ministerio de Salud deberá emitir los permisos necesarios para que los adultos que los soliciten puedan cultivar y usar cannabis, en cantidades límites determinadas por la ley. Sin tales permisos, seguirán siendo considerados como un crimen el cultivo y el consumo, al igual que su venta y tráfico.
La nueva legislación determina que el uso recreativo legal del cannabis será reglamentado por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos (Cofepris), aunque desde ya se ha determinado la prohibición del consumo de marihuana en sitios públicos y la de conducir o manejar maquinaria bajo sus efectos. La decisión de la Corte Suprema, por su parte, deberá ser sometida ante el Congreso, que en caso de aprobarla crearía el mercado legal de marihuana más grande en el mundo.
La declaración de inconstitucionalidad de los artículos que impedían el consumo, la adquisición, la siembra y la distribución de cannabis fue respaldada por ocho miembros de la Corte Suprema frente a tres que se opusieron, y ahora queda en manos del Congreso definir su aprobación, una responsabilidad que ha postergado a pesar de haber contado con tres extensiones para hacerlo.
La medida de la Corte Suprema fue bien recibida por grupos de defensores que soportan sus peticiones en el derecho al libre desarrollo de la personalidad, respaldados por conceptos de la Corte misma que se ha pronunciado ya sobre la inexistencia de riesgos para la salud derivados del consumo de cannabis. En México, el uso del cannabis para aplicaciones terapéuticas ha avanzado de manera más libre y su producción y comercialización ha abierto un mercado productivo de productos para fines médicos.
El presidente de la Corte Suprema calificó la declaración de inconstitucionalidad de las prohibiciones como “un día histórico para las libertades la consolidación del libre desarrollo de personalidad en el uso recreativo del cannabis”. La directora de la organización México Unido contra la Delincuencia, Lisa Sánchez, se mostró igualmente complacida con la medida, señalando la responsabilidad que tienen los miembros del poder legislativo mexicano para consolidar este avance, “Crear un mercado legal de la marihuana sigue siendo cosa del Congreso”, señaló.
