En un paso significativo hacia la sostenibilidad, Nestlé, una de las principales empresas de alimentos y bebidas a nivel mundial, se ha unido a tres de las compañías de envío más grandes: Hapag-Lloyd, Maersk y CMA CGM, para trasladar la mitad de sus necesidades de transporte a combustibles alternativos de menor emisión.
El cambio implica la adopción de barcos de carga que utilizan combustibles derivados de residuos, como aceite de cocina usado, con el objetivo de reducir las emisiones anuales de gases de efecto invernadero en aproximadamente 200.000 toneladas métricas de CO2 equivalente. Esta iniciativa estratégica se espera que evite el uso de alrededor de medio millón de barriles de petróleo crudo para el transporte marítimo.
"Alcanzar el equilibrio neto requiere cambiar muchos aspectos de la manera como obtenemos, fabricamos y distribuimos nuestros productos", enfatizó Stephanie Hart, vicepresidenta ejecutiva y directora de Operaciones de Nestlé al respecto. "Los acuerdos que hemos firmado con nuestros socios de envío nos ayudarán a reducir las emisiones y a disminuir inmediatamente nuestra huella de carbono. Sabemos que esto es una solución provisional y seguimos alentando el desarrollo de soluciones a largo plazo para la descarbonización en el envío y la distribución".
Aunque el transporte marítimo constituye actualmente una fracción relativamente pequeña de la huella de carbono total de Nestlé, la compañía está comprometida en minimizar el impacto de sus servicios logísticos en el medio ambiente como parte de su objetivo general de alcanzar emisiones netas cero.
Combustibles verdes: un cambio revolucionario en la reducción de emisiones
Los combustibles derivados de residuos, según indican las compañías transportadoras, ofrecen una reducción de al menos el 70% en emisiones equivalentes en comparación con las opciones estándar. Este cambio hacia alternativas más ecológicas se alinea con la dedicación de Nestlé a explorar enfoques innovadores en su búsqueda de prácticas comerciales sostenibles.
Los acuerdos firmados con Hapag-Lloyd, Maersk y CMA CGM cubren la mitad de los volúmenes de envío de Nestlé para 2023, con la opción de extender el compromiso en 2024 y más allá. Esta colaboración innovadora significa que estas flotas líderes de la industria del transporte marítimo utilizarán combustibles alternativos para mover una importante cantidad de carga, contribuyendo de manera sustancial a la conservación del medio ambiente.
Thorben Nibbe, gerente nacional de Hapag-Lloyd Suiza, reconoció el impacto positivo de la colaboración, declarando: "Nestlé es un cliente clave de Hapag-Lloyd, y a través de esta colaboración, estamos reduciendo significativamente las emisiones de CO2e".
Maersk, con el objetivo de ser una empresa con emisiones netas cero en todas sus áreas de negocio para 2040, reconoce a Nestlé como uno de los mayores clientes de sus soluciones sostenibles. Para la empresa danesa, esta asociación representa una tendencia creciente entre empresas líderes a nivel global que adoptan soluciones de baja emisión para el transporte marítimo. Johan Sigsgaard, vicepresidente ejecutivo y director de Producto Oceánico de A.P. Moller - Maersk, elogió la decisión de Nestlé, señalando que "Este es un paso muy decisivo por parte de Nestlé para utilizar nuestra solución de emisión muy baja de gases de efecto invernadero para el 100% de su carga marítima".
Christine Cabau, vicepresidenta ejecutiva de Activos y Operaciones del Grupo CMA CGM, expresó su orgullo por el innovador acuerdo, y afirmó que "Estamos muy orgullosos y felices de haber establecido este acuerdo con Nestlé, uno de los primeros de su tipo, en el que los transportistas y los propietarios de carga comprometen la descarbonización de la globalidad de las emisiones de envío del alcance 3. Estas soluciones constructivas ya están disponibles con CMA CGM para acelerar en este camino".